Endeudarse hoy en día es muy fácil. Los bancos brindan muchas facilidades a través de tarjetas de crédito, créditos rotativos o créditos para la compra de vivienda o vehículo, que hacen que sea cada vez más sencillo y rápido conseguir los bienes y servicios que deseamos. Pero cuidado, esto puede ser una trampa que termina ahogando tus finanzas personales.
En general, las personas se endeudan porque en un determinado momento no disponen del dinero para cubrir una necesidad, por ejemplo, una cirugía o un arreglo en su vivienda. Pero cada vez es más común que utilicemos el crédito para comprar cosas que realmente no necesitamos y allí tenemos una bandera roja.
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Las deudas salen caras, pues debes pagar un interés por ellas y en estos momentos de elevada inflación y tasas altas a nivel mundial, estas son aún más costosas. Los créditos de consumo, por ejemplo, están tocando tasas del 40%, esto quiere decir que, si te atrasas en el pago, tu deuda puede crecer exponencialmente. Además, tienes que jugar con la incertidumbre, pues no estás seguro de que mañana tengas las mismas condiciones de hoy para hacer tus pagos.
Así que mi recomendación es que solo te endeudes con bienes o servicios que te ayuden a producir más dinero y no que te lo quiten. Precisamente, estas son cuatro cosas para las que jamás debes pedir un préstamo:
Pagar otro préstamo
Es una pésima idea endeudarse para pagar otro préstamo porque es como una bola de nieve. Poco a poco las deudas van creciendo y no estás teniendo en cuenta tu capacidad de pago, es decir, seguirás gastando más de lo que tienes, una regla básica de las finanzas personales que no se debe romper y que pone en riesgo tu futuro. Además, esto afectará tu historial crediticio y te limitará las posibilidades de obtener créditos a futuro.
Un carro de lujo
Si bien debemos darnos gustos de vez en cuando, lo mejor es no gastar en bienes de lujo que realmente no necesitamos y que utilizamos solo para presumir. Un vehículo de lujo solo te generará gastos, como la gasolina, el mantenimiento y la pérdida de valor, así que evalúa para qué lo vas a usar y si vale la pena gastar todo este dinero y, sobre todo, pagar el costo de la deuda.
Un viaje de lujo innecesario
Aunque las experiencias son una inversión importante porque enriquecen tu vida, es fundamental que a la hora de planear un viaje no te excedas, sino que lo ajustes a un presupuesto que puedas pagar. Recuerda que en los viajes debes tener en cuenta que además del interés, podrías tener gastos adicionales por la moneda con la que haces tus compras, por ejemplo, el dólar, lo que incrementaría tu deuda.
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Anillo de compromiso
Si estás dispuesto a pasar tu vida al lado de una persona, no será necesario que gastes millones en un anillo de compromiso, un detalle que toque el corazón será mucho mejor. Debes priorizar tus deudas, así que mejor empiecen a planear un proyecto de vida juntos, con inversiones que sean rentables para ustedes en el largo plazo.
¿En qué debes endeudarte?
Las deudas también deben ser inteligentes. Debes elegir bienes y servicios que se conviertan en una inversión. Entre ellos, quiero destacar especialmente la educación, pues con las capacidades que vas a adquirir lograrás mejorar tus ingresos en el mediano y largo plazo. Piensa en inversiones, por ejemplo, en bienes raíces y compara el costo de la deuda con la rentabilidad.
Recuerda que siempre que consideres pedir un préstamo debes tener en cuenta tu capacidad de endeudamiento, es decir, asegurarte de que puedas pagar esos recursos a futuro, de manera que no pongas en riesgo tu libertad financiera.
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