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5 errores más comunes de los emprendedores y cómo evitarlos

Cada vez hay más emprendimientos en Latinoamérica, esto no es nuevo; sin embargo, hay algo que está pasando en el mundo y es el deseo de las personas por dejar sus trabajos y emprender sus propios proyectos, según el  nuevo Índice de Tendencias Laborales de Microsoft 41% de las personas han considerado esta opción. Si es tu caso y quieres emprender, ojo a estos errores que no puedes cometer si quieres ser exitoso.

El boom de emprendimiento en Latinoamérica se ha visto influenciado por diferentes variables, así lo confirma el último estudio sobre emprendimiento de Ipsos:  no hay duda de que hay un espíritu emprendedor en la región, durante los 2 últimos años los emprendimientos dirigidos por mujeres han tenido un auge y atravesamos por una pandemia que nos hizo reevaluar las opciones, 3 de cada 10 personas que ha iniciado un negocio afirma que no tenían la intención de emprender pero gracias al COVID lo hicieron.

Sin embargo, así como aumentan los emprendimientos también lo hacen los fracasos,  cerca del 75% de las startups cierran sus puertas a los 2 años de iniciar, y esto pasa porque se suele caer en algunos errores.

5 Errores que pueden llevar a un emprendimiento al fracaso

Aquí te menciono los que considero más importantes, basados en mi carrera como empresaria y el conocimiento que tengo de la industria al haber crecido en una familia de emprendedores.

1. No tener una buena idea de negocio:

las buenas ideas son las que solucionan un problema y además tienen un diferencial. Si tu emprendimiento tiene un ADN diferente seguro va a ser exitoso.

Para lograr esto debes investigar mucho, analizar el mercado y la competencia, y ver si realmente tu idea es novedosa e innovadora, asegúrate de que no vas a ofrecer más de lo mismo.

2. Aburrirse muy rápido:

muchos emprendedores piensan que los resultados se van a ver de la noche a la mañana y en menos de 6 meses se van a convertir en ricos, pero esto no es así. Las empresas más grandes del país empezaron con un negocio pequeño y esos emprendedores aún con 80 años o más siguen trabajando.

Si quieres ser emprendedor debes entender que esto no es una cosa fácil, te vas a tardar para tener éxito y necesitas de un esfuerzo permanente, de todos los días. Tienes una responsabilidad inmensa contigo mismo de saber que no va a ser fácil.

3. Tener un modelo de negocio equivocado:

uno de los errores más comunes es un modelo que no genera rentabilidad, inician el negocio y a la hora de ver los números todo está en rojo y al final terminan en la quiebra porque no se hicieron los cálculos bien.

Hay personas que ni siquiera saben sacar la rentabilidad de un producto y desconocen que existen fórmulas para hacer esto.  Antes de lanzarte a abrir tu negocio debes conocer cuál será la ganancia real de los productos y/o servicios que ofreces.

4. Hacer una sociedad equivocada:

un error es asociarse con personas que tienen principios y valores diferentes. Hay temas que no son negociables, como la ética y los principios.

Si tienes la oportunidad de tener un socio debes pensar muy bien con quién lo haces y delimitar cuál es papel de cada uno en la compañía, las responsabilidades de cada uno se tienen que aclarar previamente para evitar roces y problemas que puedan llevar a terminar con la empresa o el negocio.

5. Excederse con los gastos iniciales:

está bien que quieras tener la mejor empresa, en el mejor lugar, con los mejores equipos y una nómina amplia. Pero al empezar todos tus gastos deben estar muy medidos, los gastos fijos no pueden superar los ingresos. Empieza con lo que te genere menos gastos fijos, muchas de las empresas que hoy son muy grandes empezaron en un cuarto de 2×2, lo digo por experiencia.

Lo mejor que puedes hacer es ir creciendo poco a poco a medida de que van aumentando las ganancias.

Si quieres consultar más consejos sobre emprendimiento no te pierdas mis contenidos en moviendonegocios.com.

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En algún momento de nuestras vidas, todos nos encontramos en una encrucijada, buscando respuestas a las preguntas más profundas sobre nuestro propósito.